En el último tiempo hemos visto a investigadores y científicos como Stephen Hawking, Elon Musk y Steve Wozniak advertir en términos apocalípticos sobre los peligros de los avances en el área de la inteligencia artificial, considerando su uso militar y la posibilidad de un escenario tal como en la saga "Terminator".

 

Y aunque algunos científicos muestren sus dudas al respecto, al parecer los adelantos van más rápido de lo que se piensa. Así lo demostró un estudio del Massachusetts Institute of Technology (MIT) que reveló que las máquinas ya tienen la inteligencia equivalente a un niño de cuatro años de edad.

 

De acuerdo a la investigación, las máquinas cada vez están mejorando en tareas específicas como jugar al ajedrez, reconocer fotos y hacer conmutaciones complejas, aunque por ahora es difícil que alcancen un grado de inteligencia general. 

En concreto, la máquina apodada "ConceptNet4" fue puesta a prueba con el test de inteligencia Wechsler para niños, comúnmente utilizada en las escuelas de Estados Unidos y que consta de cinco categorías, con preguntas de vocabulario ("¿qué es esto?"), información ("¿dónde podemos encontrar a..."), similitudes ("en qué se parecen"), comprensión ("Por qué") y razonamiento (se entregan pistas para averiguar si el encuestado reconoce el objeto).

Según el MIT se modificaron algunas preguntas y se adaptaron para que la máquina pudiera entenderlas, pero no cambió en absoluto el resultado final: buenas calificaciones en vocabulario y similitudes, puntuación media en información y malos resultados en razonamiento y comprensión.

"La máquina ConceptNet tiene la capacidad normal para un niño de cuatro años de edad, y debajo del promedio de cinco a siete años", concluyeron los investigadores.

El documento señala que los resultados tienen que ver con la forma en que la máquina interpreta las preguntas, por lo que a veces se entregaban respuestas ilógicas. Los investigadores no pudieron explicar las anomalías pero sí sugirieron maneras para mejorar la prueba, como por ejemplo insertar preguntas utilizando lenguaje natural a través de un asistente virtual como Siri de Apple. 

Fuente: MIT